Índice
Incluido en la revista Ocronos. Vol. III. Nº 8– Diciembre 2020. Pág. Inicial: Vol. III;nº8:22
Autor principal (primer firmante): Patricia Aznar Serrano
Fecha recepción: 6 de noviembre, 2020
Fecha aceptación: 29 de noviembre, 2020
Ref.: Ocronos. 2020;3(8):22
Autoras
Patricia Aznar Serrano.Graduada en Enfermería. Experto Universitario en Cuidados de Anestesia.
Selina Buil Sanz.Graduada en Enfermería.
Tania Fuentes Cihuela.Graduada en Enfermería. Experto Universitario en Cuidados de Anestesia.
Blanca María Higueras San Román.Graduada en Enfermería
Resumen
La ventilación mecánica es un procedimiento que suple o ayuda a la función respiratoria del paciente cuando ésta está alterada que ha resultado ser eficaz, disminuyendo tanto las complicaciones como los costes asociados a la ventilación mecánica invasiva.
La ventilación mecánica no invasiva (VMNI) cuenta con numerosos beneficios pero que sólo se conseguirán si existe una adaptación correcta al aparato y una adecuada tolerancia por parte del paciente. De ahí radica la importancia del buen manejo de la técnica y los cuidados por parte del personal de Enfermería.
Introducción
La ventilación mecánica es un procedimiento que suple o ayuda a la función respiratoria del paciente cuando ésta está alterada. Se puede administrar de forma invasiva, generalmente mediante la colocación de un tubo endotraqueal, o de forma no invasiva, mediante una mascarilla, sin precisar el aislamiento de la vía aérea y manteniendo intactas las barreras naturales de defensa de la vía aérea (1).
La Ventilación Mecánica No Invasiva (VMNI) está indicada principalmente en pacientes con Edema Agudo de Pulmón y en la Insuficiencia Respiratoria Aguda, y ha resultado ser un procedimiento eficaz que disminuye tanto las complicaciones como los costes asociados a la ventilación mecánica invasiva (2). Sin embargo, debe ser lleva a cabo por personal sanitario bien formado y requiere supervisión constante, ya que se trata de una técnica especializada y compleja (3,4).
La ventilación mecánica no invasiva (VMNI) cuenta con numerosos beneficios entre los que se encuentran la disminución de la necesidad de intubación endotraqueal, reducción de la morbimortalidad y también del tiempo de ingreso hospitalario. Además de mejorar la sintomatología del paciente, consigue mejorar su calidad de vida y determinados parámetros fisiológicos (2,5). También contribuye a disminuir el trabajo respiratorio del paciente, proporcionando descanso a la musculatura, y a mantener una ventilación adecuada (3). Sin embargo, estos beneficios sólo se conseguirán si existe una adaptación correcta al aparato y una adecuada tolerancia por parte del paciente, de ahí radica la importancia de un buen manejo y conocimientos sobre esta técnica por parte del personal de Enfermería (6).
Objetivo
Describir los principales cuidados de Enfermería en pacientes que requieren ventilación mecánica no invasiva.
Metodología
Se ha hecho una búsqueda de información utilizando artículos encontrados en diferentes bases de datos, libros, protocolos clínicos y portales de Sociedades Científicas.
Desarrollo
Para poder iniciar el tratamiento de Ventilación Mecánica No Invasiva se necesitan varios elementos: respirador o ventilador portátil, interfase / mascarillas, tubuladuras, válvula espiratoria y otros accesorios, como el filtro antibacteriano, sistemas de sujeción y material almohadillado de protección, entre otros (4).
Respirador o ventilador portátil (2,5,7)
Es necesario conocer los parámetros básicos, así como los principales modos ventilatorios: Parámetros
- IPAP (Presión Positiva Inspiratoria): es la presión ejercida por el respirador durante la inspiración en la vía aérea.
- EPAP (Presión Positiva Espiratoria): es la presión conseguida en las vías aéreas durante la espiración en la vía aérea.
- Presión Soporte: diferencia entre ambas.
- Frecuencia Respiratoria
- TI: Tiempo de relación entre la inspiración y la espiración.
Modos ventilatorios
CPAP (Presión Positiva Continua de la vía aérea)
El paciente respira espontáneamente con una presión positiva continua en todo el ciclo respiratorio consiguiendo aumentar la capacidad residual funcional y la distensibilidad del pulmón.
BiPAP (Presión Positiva de doble nivel)
Modalidad en la que el ventilador administra dos niveles de presión (IPAP durante la inspiración y EPAP durante la espiración) y que permite la sincronización con la respiración espontánea del paciente.
Interfase y mascarillas (2,4,8)
Son los dispositivos que se colocan en la cara del paciente y se conectan a la tubuladura del respirador. El tamaño debe ser adecuado en función de la anatomía del paciente, ya que es uno de los factores que determinan el éxito o fracaso de esta modalidad de ventilación. Existen varios tipos:
- Mascarilla nasal: cubre la zona desde la raíz nasal hasta el labio superior, sin tapar la boca. Es más cómoda, pero precisa que el paciente mantenga la boca cerrada para evitar que la compensación de fugas haga que la mascarilla sea intolerable.
- Mascarilla naso-bucal: cubre tanto la nariz como la boca, consiguiendo mayor control en las presiones y obteniendo mejores resultados que con la anterior.
- Mascarilla facial: son las más utilizadas. Son de un material rígido, bordeadas por una lámina de silicona que se adapta a la anatomía de la cara del paciente, dejándola cubierta por completo.
Tubuladuras
Permiten el paso del aire desde el respirador hasta la interfase ya que se conectan por un extremo al ventilador y por el que lleva la válvula espiratoria, a la mascarilla del paciente. Suelen ser largas, flexibles y corrugadas (haciendo forma de muelle) (4).
Válvula espiratoria
Es imprescindible para que pueda salir el aire espirado del paciente. Nunca se debe quitar ni obstruir (4).
Accesorios (2,5)
- Filtro antibacteriano desechable: se puede colocar entre el ventilador y la tubuladura. Reducen a incidencia de infecciones nosocomiales.
- Sistema de sujeción: arnés o gorro.
- Fuente de oxígeno: caudalímetro y alargadera o sonda de oxígeno. Necesario para aportar oxígeno complementario.
- Conexión para administración de inhaladores
- Humidificadores
- Material de almohadillado: es importante colocarlo en las zonas donde la mascarilla ejerza más presión con el fin de evitar lesiones en la piel.
Actuación de Enfermería en pacientes con ventilación mecánica no invasiva (VMNI) (4,5,8)
Cuidados antes del inicio de la VMNI
Informar al paciente
Para que el tratamiento tenga éxito, el paciente debe colaborar. Es necesario actuar con tranquilidad, informar y establecer comunicación con el paciente; proporcionar información sobre en qué consiste la terapia, su duración y / o sobre las molestias que va a poder tener y las sensaciones que va a experimentar harán que el paciente esté más cómodo y tranquilo.
Preparar el material
- Chequear el respirador.
- Comprobar las conexiones del circuito para evitar fugas.
- Seleccionar la interfase y el sistema de sujeción más adecuados al paciente y su situación clínica. Probar y ajustar la mascarilla primeramente sin sistema de sujeción y con el respirador apagado para verificar el tamaño.
- Ajuste de parámetros ventilatorios: inicialmente el médico selecciona unos parámetros que se van modificando hasta alcanzar los definitivos.
- Colocar al paciente semi-incorporado (45º aproximadamente).
- Comprobar la respiración nasal y eliminar las secreciones de las vías aéreas, si tuviese. Hidratar mucosas.
- Dejar colocado el sistema de fijación en la cabeza del paciente teniendo cuidado de que quede bien centrado.
- Poner en funcionamiento el ventilador. Es conveniente saber que el inicio de la ventilación mecánica no invasiva (VMNI) debe hacerse progresivamente.
- Conectar la mascarilla a la tubuladura y ponerla suavemente en la cara del paciente. Es aconsejable hacerlo entre 2 personas. Una vez que se haya logrado la mejor adaptación entre el paciente y la mascarilla, se sujeta a la cara del paciente mediante las cintas de ajuste del sistema de sujeción. Se debe vigilar la colocación del arnés, ya que con el tiempo las tiras pueden aflojarse y dar lugar a fugas que harán ineficaz la ventilación. Evitar, así mismo, la presión excesiva para evitar lesiones y la intolerancia del paciente al tratamiento.
- Acompañar y preguntar al paciente por sus necesidades: molestias, ansiedad, sensaciones… Proporcionar comodidad e intentar reducir su ansiedad en la medida de lo posible.
Cuidados durante la ventilación mecánica no invasiva (VMNI)
- Monitorizar permanentemente las constantes vitales: tensión arterial, frecuencia cardiaca y respiratoria, saturación de oxígeno etc., con el fin de conocer los efectos de la ventilación.
- Controlar signos y síntomas de dificultad respiratoria, sensación de ahogo, distensión abdominal, cianosis, cambios en el estado mental, cambios en los valores de la monitorización… Si es necesario, avisar al médico.
- Vigilar la tolerancia al tratamiento y la presencia de dolor o molestias.
- Registrar los parámetros obtenidos y la evolución clínica, garantizando la continuidad de los cuidados.
- Proporcionar alimento e hidratación, si el estado del paciente lo permite. Las desconexiones del respirador deben ser breves.
- Ayudar en la eliminación de secreciones, mediante fisioterapia respiratoria, eliminación por parte del enfermo o mediante su aspiración.
- Evitar lesiones cutáneas, cambiando las zonas de presión en la medida de lo posible y controlando el estado de los apósitos.
- Hidratación de mucosas mediante la aplicación de vaselina o ungüentos hidrosolubles, intentado que las desconexiones sean las mínimas posibles. Aplicar lágrimas artificiales que hidraten los ojos para evitar la aparición de conjuntivitis, sequedad o lesiones oculares.
- Control de alarmas.
Cuidados tras la ventilación mecánica no invasiva (VMNI)
- Acomodar al paciente
- Proceder a los cuidados relacionados con la hidratación de mucosas y eliminación de secreciones.
- Administrar oxígeno, según pauta.
- Recoger y limpiar el material utilizado.
Principales complicaciones asociadas a la Ventilación Mecánica No Invasiva (3,8)
- Falta de adaptación al respirador: está relacionada con la mayoría de las complicaciones de la ventilación mecánica no invasiva (VMNI).
- Intolerancia a la mascarilla. Es la causa principal del fracaso en el tratamiento con VMNI.
- Fugas debido a un mal ajuste de la mascarilla.
- Lesiones cutáneas debido a la presión.
- Complicaciones pulmonares, como atelectasias o neumonía, ya que los pacientes pueden acumular más secreciones.
- Sequedad en las mucosas.
- Conjuntivitis debido a las fugas de aire.
- Alteración en el patrón del sueño.
- Distensión gástrica, debido al acúmulo de aire en el estómago.
- Aspiración por vómitos, ya que la expulsión de éste es más complicada debido a la hermeticidad del sistema.
Conclusiones
La ventilación mecánica no invasiva es un tratamiento complejo con el cual el personal de Enfermería debe estar familiarizado y tener unos conocimientos asentados sobre su manejo.
Es necesario conseguir la colaboración del paciente para lograr los objetivos y el éxito de la técnica. Por ello, entre los cuidados de Enfermería, además, deben estar incluidos aquellos encaminados a reducir su nerviosismo y ansiedad, así como brindarle el mayor confort posible.
Bibliografía
- Pérez PJ. Ventilación Mecánica. Madrid: Fundación Española del Corazón. Disponible en: https://fundaciondel corazon.com/informacion -para- pacientes/tratamientos/ ventilacion-mecanica.html
- Del Castillo Otero D, Cabrera Galán C, Arenas Gordillo M, Valenzuela Mateos F. Ventilación mecánica no invasiva. NEUMOSUR. 2003; 13: 167-85.
- Vergara Olivares JM. coordinador. Protocolos Clínico Terapéuticos en Urgencias Extrahospitalarias. Madrid: Instituto Nacional de Gestión Sanitaria; 2013.
- Dirección General de Planificación y Aseguramiento. Programa de Atención a pacientes con EPOC en el Sistema de Salud de Aragón. Aragón: Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia, Gobierno de Aragón; 2011.
- Del Castillo Otero D, Cortés Caballero A, García Cuesta A, De la Cruz Castro NP. Ventilación mecánica no invasiva (VNI) en pacientes agudos y crónicos. 2016;14: 179-193
- Villar Álvarez F, Jareño Esteban J, Álvarez-Sala Walther R. Patología respiratoria: manual de procedimientos de diagnóstico y control. Madrid: Gráficas Enar S.A.; 2007.
- Almajano Navarro V, Gimeno Sánchez AI, Hernández Alaya R, Sandino Treceno MA, Martín Delso S, Barra Aranda P. Ventilación mecánica no invasiva en hospitalización. Actuación de Enfermería. Cuidando la salud: revista científica de Enfermería. 2006; (6): 19-28.
- Fenoll Jiménez JJ, García Navalón AF, Marchán Beneyto A. Cuidados generales a pacientes con ventilación mecánica no invasiva. Revista científica de Enfermería. 2014; (8): 1-15.