Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar en niños que acuden a consulta a la UMF 53 del IMSS león Guanajuato en periodo mayo-septiembre 2017. R-2017-1005-11

Incluido en la revista Ocronos. Vol. III. Nº 3 – Julio 2020. Pág. Inicial: Vol. III;nº3:295

Autor principal (primer firmante): Claudio David Rodríguez Galindo

Fecha recepción: 12 de julio, 2020

Fecha aceptación: 19 de julio, 2020

Ref.: Ocronos. 2020;3(3):295

Autores: Rodríguez Galindo Claudio David 1, Vásquez Sánchez Edith Alejandra 2, Hernández Ordoñez Raúl 3.

  1. Médico residente de Medicina familiar adscrito a la UMF 53, León Guanajuato.
  2. Médico familiar de Medicina familiar adscrito al HGZMF 21, León Guanajuato.
  3. Médico Familiar, Maestro en Educación adscrito al Centro de Investigación Educativa y Formación Docente del IMSS, León, Guanajuato.

RESUMEN

Título: Trastorno de déficit de atención y disfunción familiar en niños que acuden a consulta a la UMF 53 del IMSS León, Guanajuato en 2017.

Antecedentes: El TDAH es una patología del neurodesarrollo caracterizada por un patrón de conductas persistentes de inatención y/o hiperactividad-impulsividad con una prevalencia del 5.7 al 26.8 en Latinoamérica de etiología multifactorial, afecta principalmente de 6-12 años de edad y su diagnóstico es clínico.

Publica TFG cuadrado 1200 x 1200

Objetivo: Conocer la prevalencia del trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar en niños que acuden a consulta a la UMF 53 del IMSS León Guanajuato.

Material y métodos: Estudio transversal descriptivo, participaron 202 niños entre 6 y 12 años. Se aplicaron el cuestionario DSM V, APGAR familiar y FACES III. El análisis estadístico se realizó mediante el programa NCSS 2007.

Resultados: La prevalencia obtenida fue del 31.2%, predominó el sexo masculino en proporción del 1.33:1, las edades predominantes para el TDAH con predominio hiperactivo y combinado fue de primero a tercero de primaria y con predominio del déficit de atención fue cuarto de primaria y primero de secundaria, la relación TDAH y funcionalidad familiar obtuvo una correlación negativa débil, a mayor TDAH mayor grado de disfunción familiar.

Conclusiones: Los resultados encontrados del presente estudio servirán para futuras investigaciones donde se busquen correlaciones entre factores de riesgo y la funcionalidad en sujetos con diagnóstico previo de TDAH ya que en el presente el número de pacientes con esta patología fue muy bajo.

Palabras clave: Trastorno de déficit de atención, Prevalencia, funcionalidad familiar.

ABSTRACT

Title: Attention deficit disorder and family dysfunction in children attending the Family Medical Unit number 53 of the IMSS León, Guanajuato in 2017.

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Background: Attention deficit disorder is a neurodevelopmental pathology characterized by a pattern of persistent inattention and / or hyperactivity-impulsivity behaviors with a prevalence ranging from 5.7 to 26.8 in Latin America, the etiology is multifactorial, mainly affects the school age of 6 -12 years of age and its diagnosis is performed clinically with DSM V being one of the most commonly used screening tests in clinical practice.

Objective: To know the prevalence of attention deficit disorder and family functionality in children who come to the Family Medicine Unit number 53 of the IMSS León Guanajuato in May-September 2017.

Material and methods: A descriptive cross-sectional study was carried out, in which 202 children between 6 and 12 years of age, enrolled in FMU 53, were studied. The instruments applied were the DSM V questionnaire, family APGAR questionnaire and FACES III, through a direct survey, the data was captured in a data collection card. The statistical analysis was carried out through the NCSS program, version 2007, using frequencies and percentages for qualitative variables; mean and standard deviation for quantitative variables.

Results: The prevalence obtained in the UMF 53 Leon, Guanajuato was 31.2% higher than that predicted in the bibliographies, the male sex predominated in relation to the female with a ratio of 1.33: 1, the predominant ages for the ADHD type with impulsive hyperactive predominance and the combined type was from 1st to 3rd grade of primary school and for the ADHD type with predominance of attention deficit it was 4th grade of primary and 1st of secondary, in relation to ADHD and family functionality a weak negative correlation was obtained, so that higher ADHD greater degree of family dysfunction.

Conclusions: The results of the present study will serve as a basis for future research in which correlations between risk factors and functionality in subjects with a previous diagnosis of ADHD are sought, since in the present the number of patients with this pathology was very low.

Keywords: Attention deficit disorder, prevalence, family functionality.

INTRODUCCIÓN

El trastorno de déficit de atención es una patología infra diagnosticada y que afecta cada vez en mayor proporción a los niños. Se define como un patrón de conductas persistentes de inatención y/o hiperactividad-impulsividad; por sus características comportamentales se ha asociado con un bajo desempeño académico y rechazo social de los pares 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7. El uso de servicios de salud en nuestro país puede tardar de 8 a 15 años, el 15% recurre a la automedicación y la búsqueda de atención especializada se ha asociado a una mayor intensidad del trastorno y con un mayor nivel educativo de los padres 8.

La prevalencia del trastorno de déficit de atención con o sin hiperactividad (TDAH) en población infantil va de 1.6 a 26.8%1; influyen la región geográfica y la edad de la población muestreada, reportándose una disminución de los síntomas con el paso del tiempo 1, 2, 9,10.

La etiología de este trastorno es multifactorial; dentro de los factores de riesgo asociados están el género masculino, la carga genética, las complicaciones durante el embarazo, especialmente el hábito de fumar, consumir alcohol, posibles niveles de fenilalanina en la madre y de forma cuestionable el estrés y la ansiedad. También se asocia a antecedentes perinatales como la toxemia materna, sufrimiento fetal, prematurez e hipoxia fetal, alcoholismo, así como el traumatismo craneoencefálico 1, 4,6,7,9,11,12,13,14,15 ,16.

Clínicamente se manifiesta con aburrimiento, distracción con facilidad, impulsividad y la hiperactividad 2,4, 17. De acuerdo a los criterios del DSM V11, puede ser clasificado según el síntoma predominante en: inatento; impulsivo e hiperactivo y tipo combinado 5.

El TDAH se diagnostica clínicamente, aunque no está recomendada la realización de pruebas complementarias, se establecen una serie de recomendaciones como, incluir una prueba de screening como la propuesta por el DSM V; entrevistas clínicas con los padres y los pacientes, evaluación de trastornos psiquiátricos comórbidos y revisión de la historia médica, social y familiar del paciente 7,18,19,20.

Funcionalidad familiar

La funcionalidad familiar es un concepto de carácter sistémico, que aborda las particularidades por las que se relacionan internamente las familias confiriéndoles identidad propia 21, 22. Para que una familia sea funcional debe cumplir tres funciones esenciales: la satisfacción de necesidades materiales, el tránsito por el ciclo vital y la solución de las crisis.

Los instrumentos de atención integral a la familia ofrecen una apreciación gráfica y esquemática de la familia y sus relaciones, permite desarrollar una visión integrada de las interacciones actuales, los puntos débiles y fuertes, así como su desarrollo histórico 23, 24. Dentro de los instrumentos más empleados, están: el APGAR familiar, la clasificación triaxial, FACES III y Genograma 23, 25.

El APGAR familiar es un cuestionario de cinco preguntas, es una escala en la cual el entrevistado coloca su opinión respecto del funcionamiento de la familia 23, 26 y evalúa 5 componentes: adaptabilidad, cooperación, desarrollo, afectividad y capacidad resolutiva 22, 25,26.

El cuestionario Faces III tiene como finalidad evaluar la funcionalidad familiar integrando tres dimensiones: adaptabilidad, cohesión y comunicación. Este modelo propone que las dimensiones de adaptabilidad y cohesión presenten cuatro posibles grados o niveles, de los cuales los intermedios son normales o balanceados, mientras que los más altos y más bajos son extremos (disfuncionales) 23, 27, 28.

Funcionalidad familiar y TDAH

El contexto familiar tiene un papel fundamental en el curso del TDAH. La disfunción familiar puede constituir un factor de riesgo que interactúa con la predisposición del niño y exacerba la presentación de los síntomas y su continuidad, los factores familiares no se consideran como la causa original del TDAH, pero sí se cree que mantienen e incluso amplifican la sintomatología de éste en el curso del desarrollo 29, 30. Las familias con niños con TDAH poseen una menor intensidad en la relación, baja cohesión familiar y menos libertad de expresión 29, 31, estas requieren que un integrante de la familia asuma el papel de cuidador, sin embargo, el escaso apoyo social y la falta de orientación se pueden asociar con el manejo ineficaz de la situación de su familiar enfermo 31, 32, 33.

La funcionalidad familiar se considera un factor determinante en la conservación de la salud o en la aparición de la enfermedad entre sus miembros; también se ha observado que a mayor deterioro por la evolución de la enfermedad del paciente, existe una menor funcionalidad familiar 32.

OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL

  • Conocer la prevalencia del trastorno de déficit de atención y la funcionalidad familiar en niños que acuden a consulta a la UMF 53 del IMSS León Guanajuato en periodo mayo- septiembre 2017.

OBJETIVO ESPECIFICO

  • Identificar la prevalencia de Trastorno de déficit de atención por edad y sexo.
  • Identificar la funcionalidad familiar en niños con Trastorno de déficit de atención.
  • Determinar si existe asociación entre el TDAH y la funcionalidad familiar.

MATERIAL Y MÉTODOS

El diseño del estudio es transversal descriptivo.

El tipo de muestreo fue no probabilístico por casos consecutivos participando 202 sujetos de 6 a 12 años. La muestra entrevistada se obtuvo en la consulta externa de medicina familiar de la UMF 53 de León, Guanajuato de niños sanos que acudían a la consulta externa por cualquier padecimiento.

Los instrumentos utilizados fueron cuatro: la cedula de identificación, Cuestionario DSM V y cuestionario APGAR y el cuestionario FACES III.

La cedula de identificación se llenó con datos de padres como la escolaridad y su estado civil, datos del sujeto de estudio como su escolaridad, edad, sexo y antecedentes perinatales asociados al TDAH.

El cuestionario DSM quedó conformado por cinco criterios, en donde el criterio A se enlistan 18 síntomas conductuales, el criterio B es la edad de aparición ,El criterio C es el ámbito social en el que se presenten y la afectación del mismo y en el criterio E se excluyen otras causas que expliquen los síntomas .La funcionalidad familiar se evaluó mediante los cuestionarios APGAR y FACES III.

El primero consta de cinco reactivos, aplicados mediante una breve entrevista a diferentes miembros de la familia dándoles una calificación final y así poder tipificar a la familia como altamente funcional, con moderada disfunción familiar y familia altamente disfuncional y cuando el resultado de la encuesta pasada presente algún grado de disfunción familiar se aplicó el FACES III que es un instrumento de auto aplicación que evalúa dos principales funciones adaptabilidad y cohesión y al final con la suma de puntos poder tipificar a la familia como balanceada o disfuncional

Posterior a la autorización del comité local de investigación y ética se acudió a la consulta externa de medicina familiar de la umf 53 a identificar posibles sujetos de estudio, se explicó a los padres o tutores el objetivo del estudio y se les invitó a participar, previa firma del consentimiento informado, el investigador aplicó la encuesta, compuesta por la cedula de identificación de datos, Cuestionario DSM V y cuestionario APGAR, cuando en este último los resultados fueron moderada disfunción familiar o familia altamente disfuncional se les aplicó el cuestionario FACES III .

Criterios de inclusión: Niños de este rango de edad: 6-12 años, sexo indistinto, que acudiera a la consulta externa por cualquier motivo de consulta.

Criterios de exclusión: Que los padres no acepten participar en el estudio, niños con déficit mental o alguna alteración psiquiátrica ya diagnosticada.

Se empleó estadística descriptiva (tablas de frecuencias para variables cualitativas; media y desviación estándar para variables cuantitativas), así como estadística inferencial donde se empleó Kruskal Wallis para comparación de 2 o más proporciones y Rho de Spearman para correlación entre la disfunción familiar y la presencia de TDAH, empleando el programa estadístico NCSS versión 2007.

RESULTADOS

Se encuestaron 202 derechohabientes entre 6 y12 años de edad que cumplieron los criterios de inclusión; la edad promedio fue de 8.79 + 1.98 años, con un rango de 6. La distribución por sexo fue de 50% para cada uno.

Se encontró una prevalencia TDAH de 31.2% (63) tras la aplicación del cuestionario DSM 5, siendo el subtipo más frecuente el TDAH con predominio de déficit de atención. (Ver gráfica 1)

Gráfica 1. Prevalencia de TDAH en la UMF No. 53

Ver: Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar, al final del artículo

En relación a la prevalencia de TDAH por edad podemos observar lo siguiente, en el TDAH de tipo combinado se observa que de primero a tercero d primaria tiene un porcentaje del 59.38%, el TDAH con predominio hiperactivo presenta un porcentaje del 80% y el TDAH con predominio en desatención tiene mayor prevalencia en 4to y 6to de primaria con un 28.57% cada uno, aplicando estadística inferencial para ver si el resultado anterior es significativo se corre Kruskal Wallis dando como resultado una p de 0.126719 por lo que no se rechaza la hipótesis nula, concluyendo que no es estadísticamente significativo la edad en el diagnóstico de TDAH. (Ver tabla 2)

Tabla no. 2. Prevalencia de TDAH por edad

Ver: Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar, al final del artículo

En relación a la funcionalidad familiar, mediante el cuestionario APGAR se identificó la presencia de disfunción en 11.4% (23) de los casos, observamos en la siguiente tabla la distribución de la misma.

Gráfica 2. Frecuencia de Disfunción familiar

Ver: Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar, al final del artículo

DF: Disfunción familiar. DFM: Disfunción familiar moderada. DFA: Disfunción familiar alta

A todos los casos que presentaron algún grado de disfuncionalidad familiar (23 casos), se les aplico el cuestionario FACES III, para determinar la adaptabilidad y cohesión a nivel familiar y con ellos categorizarlas de acuerdo a los 16 subtipos de familias de acuerdo a este instrumento (tabla 3).

Tabla 3. Clasificación de familias según el Faces III

Ver: Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar, al final del artículo

En la tabla 4, se muestra la relación entre la presencia de funcionalidad familiar determinada mediante el APGAR familiar y la presencia de TDAH; Se encontró una correlación negativa débil de -0.197 entre ambas variables usando Rho de Spearman, ya que por Anderson-Darling se rechaza normalidad, con lo cual se puede inferir que mayor TDAH menor funcionalidad familiar.

Tabla 4. Correlación entre funcionalidad de acuerdo a APGAR y el TDAH

Ver: Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar, al final del artículo

  1. Trastorno de déficit de atención con predominio Hiperactivo impulsivo
  2. Trastorno de déficit de atención con predominio de déficit de atención.
  3. Trastorno de déficit de atención

De los 23 pacientes con diagnóstico de disfunción familiar mediante la aplicación del cuestionario FACES III, 13 pertenecen a niños con criterios de TDAH y 10 sin criterios de TDAH. En la tabla 5 se muestra una semaforización donde el color verde representa a las familias balaceadas, el amarillo a las que están en rango medio y en rojo las extremas, siendo estas dos últimas las catalogadas en el rango de disfunción familiar.

Tabla 5. Funcionalidad familiar de acuerdo a FACES III

Ver: Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar, al final del artículo

Analizando la tabla anterior, en los pacientes con diagnóstico de TDAH, al excluir las familias balanceadas solo seis se identifica disfuncionalidad familiar, donde se puede observar que el TDAH con predominio de desatención es la que presenta mayor disfunción familiar.(ver tabla 6).

Tabla 6. Relación de TDAH y FACES III familiar

Ver: Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar, al final del artículo

DISCUSIÓN

La prevalencia de TDAH identificada en la población pediátrica adscrita a la UMF 53 fue de 31.2%, siendo más alta de la esperada y superior a la referida en la literatura consultada, donde se reporta una prevalencia mundial de 3-5%, en América latina de 5.7 al 26.8% y en México de 4.54% 1,3,4. Esta situación puede deberse a un infra-diagnóstico en nuestro país, secundario a causas como:

  • El uso de los servicios de salud para esta patología en nuestro país puede tardar de 8 a 15 años y de éstos el 15 % puede recurrir a automedicación (3).
  • Los padres con niños con TDAH solo 25% consideran que sus hijos requieren atención médica y de estos solo el 13% acude a servicios de salud mental.
  • La búsqueda de atención médica solo se realiza en casos de niños con mayor intensidad de los síntomas y padres con mayor nivel educativo, en nuestro estudio vemos que el nivel educativo de los padres es la educación básica, por lo que al ser interrogados consideran que la sintomatología de desatención e hiperactividad es parte del proceso de desarrollo del niño. (4)
  • Por ultimo podemos ver que en México no existen muchos estudios sobre esta patología, existiendo solamente estudios comunitarios aislados (4).

El género que presentó mayor prevalencia de TDAH concuerda con lo que dice el DSM 5 (8). Se obtuvo una proporción hombres/ mujeres de 1.33:1, una de las hipótesis que avala esto, es el modelo de herencia multifactorial del TDAH, el cual dice que para ciertos defectos hay un fenómeno de umbral.

“…Este modelo implica la acción conjunta de muchos loci génicos y la interacción con factores ambientales, en donde el umbral es el punto en el cual coinciden y se suman los distintos factores para hacer que el defecto sea clínicamente detectable; por lo tanto, a medida que la cantidad de genes y factores asociados a una patología confluyen y se incrementan en una persona, la susceptibilidad para presentar dicha condición aumenta. En el caso del TDAH, Rhee et al proponen que hay umbrales distintivos por sexo, y que la menor frecuencia de niñas con TDAH se debe a que su umbral es más alto para la expresión del trastorno, esto es, se necesita una mayor carga genética y ambiental para que el TDAH se manifieste en el sexo femenino… (1).”

En la literatura se refiere que es más frecuente entre primero y tercero de primaria (aproximadamente entre 6 y 8 años de edad) (1,8). En los resultados de este estudio se puede ver que los subtipos con predomino de hiperactividad y combinado se presentan más en los tres primeros años y el subtipo con predominio la desatención en 4to y 1ro de secundaria, esto es debido a que la hiperactividad en los niños tiende a disminuir conforme aumenta la edad, apareciendo en etapas tempranas del desarrollo, mientras que los de inatención aparecen de manera tardía y pueden permanecer en la adolescencia, por lo que se observar que niños en primero de secundaria tienen mayor prevalencia de TDAH con predominio de desatención (1,8).

La funcionalidad familiar se evaluó inicialmente mediante el test APGAR, considerándolo solo un método de cribado, a la población en general, al detectar pacientes con disfunción familiar y TDAH, a estas últimas se le aplicó el test FACES con la finalidad de valorar falsos positivos, ya que este instrumento categoriza a las familias en 16 tipos que se pueden catalogar como balanceadas, de rango medio y extremos, siendo las familias balanceadas categorizadas como normales, identificando finalmente solo 6 familias con disfunción familiar.

La correlación encontrada demuestra que a mayor TDAH menor grado de funcionalidad familiar. El TDAH es una enfermedad multifactorial donde la familia juega un papel importante, el factor disfunción familiar no se considera una causa del TDAH pero si constituye un factor de riesgo para su desarrollo e incluso mantiene y amplifican la sintomatología (13).

Algunas de las limitaciones que se identificaron en el estudio fueron los horarios en que se realizaron las encuestas, dado que la mayoría de estas se llevaron a cabo en el turno vespertino, esto puede generar variaciones en los resultados, ya que en el horario vespertino se encuentra población de padres trabajadores lo que puede influir en la funcionalidad familiar y por consiguiente puede dar lugar a sospechar que habría mayor TDAH. Otra limitante y quizá la mayor, es que la población escogida fue solo de una unidad de medicina familiar; en México faltan estudios en poblaciones completas para poder obtener una prevalencia más confiable.

CONCLUSIONES

  • La prevalencia del TDAH en la UMF 53 del IMSS León Guanajuato fue del 31.2%, con una proporción hombre mujer de 1.33:1.
  • El porcentaje de disfunción familiar a través de FACES III es del 9.52%, se encontró una correlación negativa débil entre TDAH y la disfunción.
  • Los resultados encontrados del presente estudio servirán como base para futuras investigaciones donde se busquen correlaciones entre los factores de riesgo y la funcionalidad en sujetos con diagnóstico previo de TDAH.

Anexos – Trastorno de déficit de atención y funcionalidad familiar

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