Índice
Incluido en la revista Ocronos. Vol. IV. Nº 1– Enero 2021. Pág. Inicial: Vol. IV; nº1:119
Autor principal (primer firmante): Mª Del Rosario Rodríguez Saludes
Fecha recepción: 11 de enero, 2021
Fecha aceptación: 27 de enero, 2021
Ref.: Ocronos. 2021;4(1):119
Autora: Mª Del Rosario Rodríguez Saludes
Introducción
El SARS-CoV-2 se propaga principalmente por gotas infecciosas emitidas al hablar, toser o estornudar directamente sobre una superficie mucosa o conjuntiva de una persona susceptible, o por contacto directo con superficies contaminadas por esas gotas. Durante los procedimientos generadores de aerosoles (PGA) existe un elevado riesgo de transmisión.
Se asume que se deben implementar las medidas de precaución basadas en la transmisión aérea mientras se realizan este tipo de procedimientos, incluyendo casos sospechosos y confirmados, ya que la transmisión de la infección comienza 2 días antes del inicio de síntomas.
La permanencia del SARS-CoV-2 viable en el ambiente depende del tipo de superficies.
Para trasladar al paciente desde el servicio de urgencias de radiología (Radiodiagnóstico) y viceversa se debe tener siempre presentes los siguientes puntos y verificar:
- Identificación adecuada del paciente: nombre, apellidos.
- Medio de transporte: cama, camilla, silla de ruedas o caminando
- Comprobar si tiene algún tipo de aislamiento: aéreo o de contacto, tomando las medidas deprotecciónque fueran necesarias.
- Si el paciente está consciente y orientado comprobamos su identidad, si no fuera posible, nos aseguramos por la pulsera identificativa.
- Asegurar durante el traslado que todo el material sanitario que porta el paciente va en las condiciones adecuadas (sueros y vías, botella de oxígeno, bolsas de orina, fluidos, etc.); y avisar de cualquier incidencia al personal adecuado en el caso de movilización accidental durante el traslado.
El celador debe colaborar en la sala de rayos asistiendo al Técnico de rayos en la colocación y posicionamiento del paciente siguiendo sus instrucciones para realizar las pruebas de imagen y valoración clínica del paciente.
La ecografía torácica es una técnica para evaluar infecciones respiratorias y posibles complicaciones. Se puede realizar con el paciente encamado y no irradia al paciente. Hay que tener en cuenta que supone más exposición al personal que realiza la prueba comparándola con otras.
La realización de pruebas de imagen en el seguimiento de los pacientes con infección COVID-19 debe personalizarse en cada paciente. En caso de ser necesarias se buscará la que sea más resolutiva y sirva de referente para controles posteriores.
Palabras clave
Traslado, verificar, métodos, aislamiento.
Objetivo
Establecer unas normas y garantías de asistencia segura, tanto para pacientes como para los profesionales implicados.
Mantener la seguridad del personal sanitario y del paciente desde urgencias y durante todo el procedimiento.
Resultado
Desde el primer contacto celador/paciente y profesionales, utilizando los protocolos de triaje establecidos se evitará o minimizará la posibilidad de transmisiones durante el circuito que realice el paciente a diferentes pruebas diagnósticas, su ubicación y aislamiento final.
Métodos
Aislamiento del paciente
Ubicación del paciente Circuitos de separación
La infectividad parece ser mayor en los primeros momentos de instauración de los síntomas. los pacientes con clínica respiratoria serán separados, especialmente en las áreas de admisión y zonas de espera. Para ello se recomienda establecer dentro del centro sanitario, si es posible, circuitos diferenciados, tanto de pacientes como de visitas y profesionales en sectores COVID-19 y no COVID-19
Aislamiento en habitación individual
El paciente ingresará en una habitación de uso individual con baño, ventilación natural o climatización independiente. La puerta de la habitación deberá permanecer siempre cerrada.
Si existe sospecha que el paciente va a requerir procedimientos con riesgo de generar aerosoles se valorará la disponibilidad de una sala de presión negativa, o box de uso individual con baño, con ventilación natural o climatización independiente.
En caso de que exista una disponibilidad limitada de habitaciones individuales, se realizará una priorización a nivel del centro, teniendo en cuenta los recursos disponibles y las necesidades de los pacientes.
Zonas de aislamiento en cohortes
Tras una valoración individualizada, podrá realizarse el aislamiento de cohortes. Dos pacientes con COVID-19 podrán ser ingresados en una misma habitación, siempre que no concurran otras situaciones que lo contraindiquen. Se pueden emplear separaciones físicas que puedan ser desinfectadas para reducir el contacto estrecho entre pacientes. Si el centro tiene capacidad suficiente, se designará un área para el ingreso y cuidados de pacientes COVID-19.
Aislamiento domiciliario
En aquellos casos en que la situación no sea necesario el ingreso hospitalario, se podría indicar aislamiento domiciliario o en centros medicalizados, teniendo en cuenta tanto criterios clínicos como sociales, las características de la propia vivienda, asegurando previamente que tanto el paciente como sus familiares son capaces de aplicar de forma correcta las medidas básicas de higiene, prevención, y control de la infección.
Conclusión
El gran impacto que puede crear el coronavirus no solo afectará a los distintos profesionales de la sanidad, también tendrá una gran repercusión mundial en muchos otros aspectos.
Es necesario poner en práctica todas las medidas a nuestro alcance para frenar el avance del COVID y contemplar un proyecto futuro que permita tratar otros posibles virus.
Bibliografía
- https://fundadeps.org/ wp-content/uploads/ 2020/ 06/Documento_Control _Infeccion.pdf