Incluido en la revista Ocronos. Vol. V. Nº 1–Enero 2022. Pág. Inicial: Vol. V; nº1: 108
Autor principal (primer firmante): Laura Fernández Álvarez
Fecha recepción: 2 de Enero, 2022
Fecha aceptación: 19 de Enero, 2022
Ref.: Ocronos. 2022;5(1) 108
Autora: Laura Fernández Álvarez
Categoría: Personal no Sanitario
Palabras clave: comunicación, fluidez
Una organización es una estructura social, ideada para que, a través de la gestión del talento humano, se consigan unas metas previamente establecidas. Las organizaciones nacen de la necesidad humana de cooperar para llegar a la obtención de sus fines personales, debido a sus limitaciones físicas, biológicas, psicológicas y sociales. Es fundamental cuando se produzca el momento de esta cooperación, que cada uno de los miembros que constituyen el elemento humano de la organización conozca el papel que debe llevar a cabo y la forma en que sus funciones se relacionan unas con otras.
En todas las organizaciones se produce la comunicación interpersonal, que en realidad no es más que un intercambio de información y opinión entre personas.
Para la existencia de una organización es necesario que las personas integrantes sean poseedoras de la capacidad de comunicación y de actuación conjunta que conjuntamente, haga posible poder lograr la consecución de un objetivo común. El funcionamiento de una organización se rige mediante normas que tienen como objetivo la disposición y la coordinación de los recursos disponibles, bien sean materiales, bien humanos o bien financieros. Esas normas deben ser respetadas y seguidas por todos los miembros integrantes de la organización.
La comunicación es un elemento esencial en cualquier organización para mantener el contacto con otros seres humanos. A través de los distintos canales de comunicación, la información fluye en las diferentes direcciones que puede tomar:
- vertical, se produce entre los niveles directivos y los subordinados. Ya sea bien ascendente (de la base a la dirección) o descendente (viceversa).
- horizontal, se produce entre miembros del mismo nivel jerárquico. Fomenta el compañerismo y el espíritu de equipo, enriquece la formación y a su vez propicia el consenso en la toma de decisiones.
- diagonal, se produce entre personas de distintos niveles jerárquicos que se hallan ubicados en diferentes líneas de mando.
Todos los canales de comunicación surten tanto, por un lado, efectos positivos (sentimientos de colaboración y solidaridad, generando más eficiencia y mejor ambiente laboral) como, por otro lado, negativos (los rumores y las críticas negativas generan mal ambiente laboral dando lugar a un menor rendimiento para nada deseado).
Objetivo:
- recepcionar y procesar las comunicaciones internas y externas
- identificar la estructura funcional de la administración pública, distinguiendo los flujos de información en las comunicaciones orales y escritas en sus diferentes formatos (de forma presencial, telemática o electrónica), y sus medios de canalización.
- transmitir la información de acuerdo con los usos y costumbres socio- profesionales habituales de organizaciones e interlocutores tipo.
- aplicar el proceso de recepción, acogida y registro de visitas en situaciones tipo, desarrollando las habilidades de comunicación adquiridas convenientes en cada una de las fases.
- aplicar las técnicas de registro público y privado, y las técnicas de distribución de la información y documentación, facilitando su acceso, seguridad y confidencialidad.
Resumen: la comunicación es la esencia de la actividad organizativa y es imprescindible para su buen funcionamiento. Una buena comunicación contribuye a una mayor capacidad de adaptación a los cambios del entorno, facilitando la consecución de los cambios y metas establecidas, satisfaciendo y fomentando una buena motivación, compromiso, implicación, responsabilidad y participación de sus miembros dentro de un buen clima laboral.
Bibliografía
- Bandura, A. (1982). Teoría del Aprendizaje Social. Madrid: Espasa Calpe, S.A.
- Bateson, G. y Ruesch, J. (1984). Comunicación: La matriz social de la psiquiatría. Barcelona: Paidós.
- Forns, M. y Boada, H. (1993). Evaluación de habilidades comunicativas en situación referencial. En M. Forns y T. Anguera (Comps.). Aportaciones recientes a la evaluación psicológica. Barcelona: PPU. 137‐158