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AUTORES: Patricia Algara Gonzalo (DUE), Ana Belén Villalba Crespo (DUE), María del Rosario Castellanos Fraile (DUE) y Jaime Cabrera Recuenco (DUE).
RESUMEN
Podemos definir duelo como la respuesta natural o proceso de adaptación emocional que se produce frente a la pérdida de una persona, objeto o evento significativo. El duelo tiene una dimensión psicológica, física y social cuya duración e intensidad depende de la significación y magnitud de la pérdida.
La muerte indica la pérdida y desaparición de una persona querida y conlleva a un trabajo de duelo. El trabajo del duelo es muy necesario y su bloqueo puede llevar a complicaciones a veces graves.
El duelo es un momento de la vida que todos nosotros, en algún momento, habremos de conocer. Sabemos que ayuda a madurar a las personas, y no hay nada más contraproducente que un duelo frustrado o que no encuentre la forma de expresarse adecuadamente.
INTRODUCCIÓN
El duelo está relacionado con situaciones vitales que implican el final de algo, pérdidas, terminaciones, finales y cambios, que son constantes a lo largo de la vida.
Según la personalidad y el entorno cultural, las reacciones ante la pérdida de un ser querido pueden ser muy diversas. Es fundamental respetar dos condiciones:
- Cada persona llega a la aceptación recorriendo caminos variados.
- Cada persona recorre el camino a velocidades diferentes.
El papel de enfermería es ayudar y cuidar a personas que se enfrentan a pérdidas de origen muy diverso. Con su participación, enfermería intenta ayudar a mitigar, aliviar e incluso modificar la aparición de efectos que distorsionan el bienestar del paciente y pueden llegar a desencadenar un proceso de duelo patológico ante este tipo de pérdidas. Por ello, es fundamental analizar este tipo de procesos para realizar actividades preventivas que vayan dirigidas a conseguir un duelo no patológico.
TIPOS DE DUELOS
De forma general, nos encontramos con dos tipos de duelo:
– Duelo Normal, que es aquel que aparece en el momento que se produce la pérdida, que incapacita durante unos días y suele ir acompañado de la negación de las circunstancias de la pérdida.
– Duelo Patológico, aquel que aparece semanas o incluso meses después de que la pérdida se produzca. Incapacita durante más tiempo que el duelo normal y la negación de la pérdida dura más tiempo. Suelen aparecer actitudes anormales, sintomatología somática relacionada con la pérdida y sentimientos de tristeza, soledad e incluso sentimiento de culpa.
Existen también otros tipos de duelo como:
– Duelos Evolutivos, infancia, pubertad, adolescencia, emancipación.
– Duelos Sociales, aquellos en los que se produce un cambio de estatus (universidad, empleo, despidos, ascensos profesionales, cambios de trabajo, situaciones de paro, jubilación…).
– Duelos Corporales, aquellos que son producidos por la pérdida de juventud o envejecimiento, estado de forma y enfermedades.
– Duelo Anticipado, el cual se da en caso de muertes anunciadas como enfermedades, separaciones en las que ya se tomó la decisión de hacerlo.
– Duelo Retardado, aquel que se da en las personas que escapan al dolor y a la realidad de la muerte del ser querido, personas que se controlan o no tienen tiempo de ocuparse de sí mismos, y aquellas en las que durante meses o incluso años cualquier imagen o recuerdo les desencadena el duelo no resuelto.
– Duelo Inhibido, aquel que se da cuando existe la dificultad de expresar los sentimientos.
– Duelo Distorsionado, aquel que se da cuando se producen reacciones desproporcionadas.
– Duelo Desautorizado, cuando el entorno de la persona no permite que continúe la fase de duelo.
ETAPAS DEL PROCESO DEL DUELO
Tras una pérdida, la persona sufre un estímulo o choque emocional que le produce un desequilibrio que provocará una serie de etapas, sin un orden establecido, que pueden incluso producirse a la vez.
Cuando una persona llega a superarlas puede ser capaz de vivir de forma favorable la nueva situación de su vida.
Las etapas son:
Impacto
Momento en el que la persona evidencia la pérdida.
Negación
La persona se resiste a tomar conciencia de la realidad y niega la realidad de la pérdida.
Rabia, Cólera
La persona reacciona violentamente ante esta situación, que le resulta inasumible.
Tristeza
Se comienza a identificar la pérdida. Se entra en una íntima conciencia de sufrimiento, en una situación de soledad.
Negociación
Comienza un proceso de aceptación. Se es consciente de la pérdida, y se inicia una negociación con quien cree que puede darle soluciones ya que la pérdida se le hace insoportable (Dios, médicos, otros recursos…).
Aceptación
Momento en el que la persona asume la pérdida producida, deshaciendo la negación como procedimiento defensivo. Ya no cabe seguir pensando que nada sucedió. Esta etapa se compone de varias fases, que son:
- Entiende la pérdida como una ofensa vital, como una herida… Acepta la realidad tal y como es.
- Deja de culpabilizarse y de buscar culpables.
- Se hace un análisis positivo de las vivencias provocadas por la pérdida que se han tenido anteriormente.
- La esperanza de la persona en una resolución al conflicto que le ha generado la pérdida. Es una esperanza que se constituye desde la vivencia y la convivencia de la pérdida. Esta fase no tiene un orden preestablecido.
PARTICIPACIÓN DE ENFERMERÍA ANTE EL PROCESO DEL DUELO
En el ejercicio profesional, Enfermería, en muchas ocasiones, se encuentra con personas que presentan o presentarán un proceso de duelo. Su participación en un proceso de duelo irá dirigido a proporcionar soporte a las personas en este tipo de situaciones. Les ayudará a expresar sus emociones y sentimientos, a potenciar sus recursos y capacidades y a adaptarse a una nueva situación. Enfermería intentará conseguir un equilibrio estable efectuando una participación eficaz mediante la relación de ayuda.
Los pasos a seguir serán:
- Ayudar a la persona a liberarse del pasado, reconociendo lo que significa la pérdida en todas sus facetas.
- Ayudará a la persona a expresar sus emociones, sus sentimientos y a adaptarse a una nueva forma de vivir.
- Volver a construir el presente con un nuevo estilo de vida introduciendo los cambios que sean necesarios para conseguirlo.
- Identificar los factores que influyen en la calidad de vida de la persona que está en el proceso de duelo.
- Abrirse al futuro y a las experiencias que se den en él con nuevas posibilidades que permitirán a la persona la capacidad suficiente para tolerar los sentimientos de separación, y permitir el acercamiento a otras personas.
- Prevenir la aparición de un duelo patológico o complicado.
- Respetar y comprender el momento personal y existencial de la persona.
PALABRAS CLAVE
Duelo; Relación de ayuda; Participación de Enfermería; Cambio; Separación.
OBJETIVOS
El objetivo principal de este trabajo es dar información sobre los procesos de duelo que puede sufrir una persona ante los diferentes tipos de pérdida y que se generan para poder planificar una participación de enfermería de calidad y efectiva para la persona que lo sufre.
MATERIAL Y MÉTODO
Para llevar a cabo este trabajo, además de basarnos en experiencias propias, se ha realizado una búsqueda bibliográfica en diferentes medios como artículos de revistas e internet, libros y bases de datos de salud (Dialnet, Cuiden, SciELO…).
RESULTADOS / CONCLUSIÓN
El proceso del duelo es necesario para poder continuar viviendo y para reencontrar la libertad del funcionamiento físico y psíquico. Este, debe vivirse dignamente, lo que implica enfrentar el sufrimiento y el dolor permitiéndonos asimilar todas las emociones que van apareciendo durante el proceso del duelo. Las emociones se ven afectadas durante el proceso, ya que normalmente no estamos preparados para entender la ausencia de los seres queridos, lo que nos lleva en ocasiones a experimentar sentimientos de impotencia, culpa, coraje…, y a alejarnos de la vida social.
Es importante reconocer y no reprimir el dolor, ya que eso permite aceptar y entender emocional e intelectualmente la pérdida.
La Enfermería tiene un papel fundamental en el proceso del duelo, ya que realizamos importantes intervenciones encaminadas a la ayuda del manejo del dolor. La intervención en este tipo de situaciones nos enfrenta en muchas ocasiones con nuestras propias experiencias y vivencias. Enfermería, realiza también una experiencia de aprendizaje.
El papel de Enfermería es de acompañar a las personas en situaciones de dificultad, lo que exige dedicación, tiempo, conocimientos y actitudes que faciliten estos procesos.
BIBLIOGRAFÍA
- Ricart N. Presentación del Protocolo de Duelo. Revista de la Asociación Española de Enfermería Clínica, Especialista Clínica y Consultor Clínico 1998.
- Equipo Vértice (2010). El duelo y la atención funeraria. Editorial Verticebook.
- Marqués S. Cuando hablamos de la muerte. Revista Rol de Enferm. 1998.
- Worden, William J. El tratamiento del duelo: asesoramiento psicológico y terapia. Barcelona: Paidós.
- Bases de datos: Dialnet, Scielo, Cuiden.
- Payás Puigarnau, Alba. Las tareas del duelo. Psicoterapia de duelo desde un modelo integrativo relacional. Madrid: Paidós, 2010 ISBN 9788449324239.