Índice
Autores: Manuel Díaz del Blanco, Silvia Nikole Arcoiza Pato, Ignacio Pérez García y Francisco José Herrero León.
Introducción
En primer lugar, es necesario conocer las diferencias entre inmigrante y extranjero. Un extranjero es una persona originaria de otro país que aún no es ciudadano del país anfitrión, pudiendo encontrarse de visita o temporalmente; sin embargo, un inmigrante es alguien que ha decidido reubicarse en un país pero que proviene de otro. Un inmigrante puede o no ser extranjero, es decir, si éste ha adquirido la ciudadanía, deja de ser extranjero.
Para prestar una buena atención a este colectivo es conveniente conocer algunas pautas que pueden ser de utilidad para que ésta sea efectiva, para ello se analizarán las principales dificultades que pueden encontrase a la hora de interaccionar con ellos.
Dificultades en la atención a inmigrantes y extranjeros
Los principales problemas que pueden encontrarse a la hora de atender a las personas pertenecientes a estos colectivos son los siguientes:
Aspectos normativos y administrativos
En cuanto a las leyes a las que están sujetos, debe tenerse en cuanta que los inmigrantes dependen todas y cada una de las leyes del país que les alberga, mientras que los extranjeros dependen únicamente de aquellas leyes destinadas a las personas que no son ciudadanos del país anfitrión. Incluso puede darse la circunstancia de tener que trabajar con personas que se encuentren en situación ilegal y no posean documentación. Todo ello conlleva un diferente proceso burocrático dependiendo del grupo al que pertenezca la persona a la que se está atendiendo.
Aspectos comunicativos
Tanto un inmigrante como un extranjero pueden encontrar grandes barreras lingüísticas a la hora de comunicarse, especialmente durante el primer periodo de estancia en un nuevo país. Únicamente no encontraran estas dificultades aquellos ciudadanos que provengan de países con la misma lengua que el nuevo país que les acoge, por ejemplo, en el caso de España, la mayoría de ciudadanos procedentes de Latinoamérica.
El aspecto lingüístico es la principal dificultad a la que debe hacerse frente a la hora de atender a este colectivo, puesto que el desconocimiento del idioma añade una especial dificultad en el proceso de atención. Supone una limitación muy importante tanto para la expresión de sus necesidades y/o problemas, como para la comprensión por parte de los profesionales sanitarios y no sanitarios de las mismas. Se pone, por tanto, en riesgo el proceso de comunicación y con ello el acceso de estas personas a los servicios sanitarios, ya que si no es posible identificar el problema difícilmente se podrá proceder a la pertinente derivación al centro competente.
Aspectos culturales
En el ámbito cultural las mayores dificultades aparecen al trabajar con personas procedentes de naciones con una organización social diferente, no existiendo este problema al atender a ciudadanos procedentes de países de nuestro entorno más inmediato, como puedan ser aquellos que provienen de otros países Unión Europea.
El desconocimiento de nuestro sistema puede poner en jaque la inclusión de estos colectivos en la sociedad, aislándoles y privándoles de los servicios sanitarios imprescindibles. Es por ello muy importante poder explicarles con claridad sus derechos y obligaciones, así como las vías de acceso y procedimientos necesarios a la hora de realizar cualquier trámite.
Conclusiones
La atención a las personas inmigrantes y extranjeras puede presentar una especial complejidad a causa principalmente de limitaciones lingüísticas y culturales. Para prestar un buen servicio a este colectivo, deberá tomarse en consideración todos los factores anteriormente citados y, en la medida de lo posible, mejorar la formación del personal de centros sanitarios respecto a la atención a la diversidad cultural.
Muchas veces, la dificultad burocrática unida a factores lingüísticos y culturales lleva a los profesionales de centros de salud a ser reticentes y mostrar un cierto rechazo a la hora de tener que atender a este colectivo. Una correcta formación, una actitud positiva y un buen grado de empatía son los tres aspectos más importantes a tener en cuenta para prestar una correcta y eficaz atención a todas estas personas, especialmente a los usuarios con dificultades a la hora de comunicarse.
Bibliografía
- Vicente Ruiz, M.J., Rodríguez Ramírez, M.C., Laencina López, T., Guillén Torres, M. Calidad en la Atención a la Ciudadanía. Estrategias. Internet. Escuela de Formación e Innovación de la administración pública de la Región de Murcia.
- ¿Cuál es la diferencia entre Inmigrante y Extranjero? (s. f.). Difiere. Recuperado de https://difiere. com/ diferencia- inmigrante-extranjero/